La doncella del mar 14

Escribir esta parte se me ha hecho extraño, como no tenía el ordenador a mano la he escrito en un folio... Ya ni me acuerdo de cuánto tiempo hace que no escribo una historia con lápiz y papel...

Bueno, aquí os dejo el siguiente fragmento de la doncella del mar. El último de la 1ª parte de esta historia 

El humano la había visto, pero a la joven sirena ya no le importaba, en ese momento su mayor preocupación era mantener a flote a la joven humana.

-¡Cuidado! ¡Se acerca una ola! – Gritó la sirena.

Pero ninguno de los humanos del barco la entendieron.

Ni siquiera la escucharon.

Tampoco escucharon a la niña que gritaba desde el interior del barco.

La ola impactó contra la sirena, haciendo que soltara a la humana.

- ¡¿Dónde está?! – Se dijo desesperada a sí misma.

Buscó por la superficie y como no la vio, se hundió en el agua.

- ¡Ahí está! – Exclamó con un poco de alivio.

- ¡Aram! – Le dijo al delfín mientras señalaba a la humana que se hundía.

El pequeño delfín nadó lo más rápido que pudo y en poco tiempo llegó hasta su objetivo.

Se colocó debajo de Nisela y la fue empujando hacia la superficie, hacia el preciado aire que comenzaba a faltarle a la joven.

- ¡Rápido! ¡Se está ahogando! – Exclamó la joven sirena con apremio mientras nadaba hacia el delfín.

Estaban lejos de la superficie y la corriente no les permitía avanzar.

- No llegaremos a tiempo… - Dijo la sirena al ver que cada vez se alejaban más de la superficie.

Miró hacia la joven inconsciente que se ahogaba sin saberlo y luego miró hacia la lejana superficie, pensando en la pequeña niña que quería jugar en el mar con un delfín.

La decisión se pintó en la cara de la joven sirena.

- Solo queda una opción. – Dijo mirando al delfín.

Él la entendió, dejó de luchar contra la corriente y ambos comenzaron a nadar hacia abajo, hacia las profundidades del mar.

Nadaron llevándose a Nisela con ellos.

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